El ciudadano atento
Ha muerto el profesor
Dr. Luis Muñoz Fernández
Siempre he preferido que mis alumnos me llamen profesor en lugar de maestro, porque esta última palabra tiene para mí resabios de veneración religiosa que no creo merecer y, además, inhibe el desarrollo del espíritu crítico y la sana rebeldía que son más necesarios que nunca para esta juventud que hoy es presa de la alienación tecnológica.
El pasado sábado 10 de junio de 2023, a los 64 años de edad, murió inesperadamente de una hemorragia cerebral Nuccio Ordine. Expiró Cosenza, pueblo de la región de Calabria, en cuya universidad era profesor de Literatura italiana. Ya no va recibir el Premio Princesa de Asturias 2023 en Comunicación y Humanidades que se le iba a entregar el próximo mes de octubre.
Estudioso y experto en el Renacimiento y la figura de Giordano Bruno, escribió libros indispensables, entre ellos el muy conocido manifiesto La utilidad de lo inútil (2013):
“… he querido poner en el centro de mis reflexiones la idea de utilidad de aquellos saberes cuyo valor esencial es del todo ajeno a cualquier finalidad utilitarista. Existen saberes que son fines por sí mismos y que –precisamente por su naturaleza gratuita y desinteresada, alejada de todo vínculo práctico y comercial– pueden ejercer un papel fundamental en el cultivo del espíritu y en el desarrollo civil y cultural de la humanidad. En este contexto, considero útil todo aquello que nos ayuda a hacernos mejores”.
Muy consciente de la importancia de la labor educativa y del papel esencial de los profesores, levantó su voz cuando durante la pandemia de COVID-19 tomó gran impulso la impartición de clases vía telemática, reconociendo su pertinencia en aquellos momentos, aunque avisando con alarma del peligro que representaba la sustitución de las clases presenciales por las impartidas a través de las computadoras.
De igual forma, señaló la creciente deriva empresarial de las escuelas y universidades que, buscando aumentar sus cada vez más escasos apoyos estatales, disminuyen los niveles de exigencia a sus alumnos, facilitando en exceso sus tareas y adoptando estrategias lúdico-educativas como la gamificación, palabra que viene del inglés game = juego, para enseñar y aprender de manera divertida. En este sentido, vale la pena recordar lo que ya anticipaba Miguel de Unamuno en 1913:
“Hay una cierta pedagogía que huye de las dificultades, huye del verdadero trabajo, huye de la austeridad. Parece que nos asusta enseñar a los niños todo lo duro, todo lo recio que es el trabajo. Y de ahí ha nacido lo de que aprendan jugando, que acaba siempre en que juegan a aprender. Y el maestro mismo que les enseña jugando, juega a enseñar. Y ni él en rigor enseña, ni ellos en rigor aprenden nada que lo valga. Y luego, no olvide usted que importa más lo que se ha de enseñar y aprender que el modo de aprenderlo. No hagamos de la Ciencia un mero medio para aplicar pedagogía”.
Nuccio Ordine nos regaló en dos maravillosos libros las citas de los clásicos con los comentarios que cada lunes les leía a sus alumnos, independientemente de la materia que estuviese impartiendo en ese momento. Se trata de Clásicos para la vida. Una pequeña biblioteca ideal (2017) y Los hombres no son islas. Los clásicos nos ayudan a vivir (2022). Escojo a manera de despedida estas oportunas palabras suyas que nos interpelan en Aguascalientes, en México y el mundo:
“Pero la escuela, y también la universidad, deberían sobre todo educar a las nuevas generaciones para la herejía, animándolas a tomar decisiones contrarias a la ortodoxia dominante. En vez de formar pollos de engorde criados en el más miserable conformismo, habría que formar jóvenes capaces de traducir su saber en un constante ejercicio crítico”.
Educar para mejorar el espíritu humano, para formar ciudadanos con independencia de juicio, porque lo que estamos haciendo cada vez más en nuestro entorno es adiestrar a los jóvenes para que tengan el perfil que demandan sus empleadores. Para que sean dóciles y felices consumidores.
Comentarios a : cartujo81@gmail.com
Artículos anteriores:
Riqueza criminal
Extraviados
Dos romanos viejos (segunda parte)
Dos romanos viejos (primera parte)
Digresiones
Un cirujano singular (quinta y última parte)
Un cirujano singular (cuarta parte)
Un cirujano singular (tercer parte)
Un cirujano singular (segunda parte)
Un cirujano singular (primera parte)
Buitres
Transparencias e impudicias
Sestear (segunda parte)
Sestear (primera parte)
La doblez de los poderosos
Aburridos
Ociosidad
Metastasis
Pobres monos pobres
Sus nombres se parecen mucho
Conciencia del agua
La afectación
La filósofa actuante
Terraplanistas
Sufrimiento psíquico
Hablemos de futbol (con o sin acento)
Huespedes
El vertedero
Mutilados y útiles
Los pobres
Un hombre fronterizo
Los otros
Desvinculados
El miedo
El neurólogo del pueblo
La ética